CARBON X 2

Pros:

1 - Si coges un ritmo de rodaje y vas cómodo, la zapatilla se presta a correr muchos kilómetros.

2 - Situar la placa de carbono en una capa inferior, mejora el tacto y la amortiguación durante la carrera.

3 - Ni un sobre salto con respecto a la estabilidad o la seguridad que transmite este modelo de running.

4 - El upper funciona bien. Buena transpirabilidad y mejora en las protecciones del contrafuerte como gran acierto.¡ en esta nueva versión.


Contras:

1 - La zapatilla no es muy ligera la verdad. De hecho, pesan prácticamente lo mismo que las Alphafly en la misma talla.

2 - Cambios cortos o salidas explosivas, le falta reacción. En esto, la Rocket X gana de paliza.

3 - A nuestro gusto, excesiva talonera. Le da peso a la zapatilla y prácticamente no se utiliza.

4 - Si te gusta la sensación de terreno y la flexibilidad en este estilo de zapatillas, entonces la Carbon X2 no está hecha para ti.

Hoka ONE ONE aprovecha para presentar un año más, su zapatilla carbonizada coincidiendo precisamente, con un nuevo “Project X”. El último Project X2 fue el momento preciso e indicado para lograr dos cosas: La primera de ellas, presentar esta nueva Hoka ONE ONE Carbon X2, y la segunda, que Jim Walmsley pudiera asaltar el récord mundial de los 100 kilómetros, precisamente con esta zapatilla en sus pies.

Si estás en nuestra web, es porque te interesa la review de la zapatilla, y si no es el caso y prefieres saber más sobre el récord, que por cierto no logró, te invitamos a encontrarlo en otras webs (no te tacharemos de vendido).

Si entramos al detalle de lo que es la Carbon X2 de Hoka ONE ONE, tendremos ante nosotros, uno de los probablemente, mejores modelos con placa de fibra de carbono para entrenar y competir, tanto para el corredor élite, como para el popular que es capaz de llegar a ritmos moderados.

Hoka ONE ONE, según nosotros, ha dado al clavo en dos aspectos que mejoran de forma significativa la experiencia en carrera con la Carbon X2. Lo veremos más adelante, pero os avanzamos que el secreto se encuentra en la nueva espuma, y en la protección del tendón de Aquiles.

¿Te planteas comprar una zapatilla con carbono y no te atreves a dar el paso? No te pierdas vistazo de la review porque las Carbon X2 apuntan maneras y puede que se conviertan en tus próximas compañeras…

Lo más sorprendente de todo sin ninguna duda, el extendido talón trasero. La Clifton Edge fue el principio de esta forma tan atípica y poco a poco, Hoka ONE ONE lo va introduciendo a otros modelos. Por cierto, las Mach 4 serán las próximas en introducirlo.

¿Tiene algún sentido? ¿Influye durante la carrera? Nosotros creemos que no demasiado.  La sensación que hemos tenido ha sido de “excesivo” en muchas ocasiones, exceptuando eso sí, la utilidad que tiene durante bajadas muy pronunciadas.

A fin de cuentas, este elemento suma peso a la zapatilla y además, cuando corremos en llano, muy pocas veces apoyamos sobre el talón con tanta fuerza para necesitar de tan exagerada base.

En plano, la verdad es que este elemento (no la zapatilla en sí) no nos ha terminado de convencer, aunque sabemos que Hoka ONE ONE lo incorpora para ofrecer un efecto más fluido. La marca llama a esta tecnología, Metarocker. Geometría en forma de balancín (rígida, por cierto) para que toda la transición sea teóricamente mucho más agradable y continúa. 

La Carbon X2 va enfocada a un corredor intensivo, de peso ligero y medio, que esté persiguiendo el rendimiento y ritmos de competición. En caso de buscar colchón y zapatilla de rodaje controlado, te recomendamos mirar por ejemplo, las Hoka ONE ONE Clifton 7.

El esfuerzo de Hoka, además de mejorar muchas de las partes de la zapatilla, ha sido la de encontrar un compuesto más agradable y menos firme que el que utilizó la primera versión de las Carbon X.

El nuevo EVA utilizado es el mismo que el de la Rocket X, es una maravilla. El tacto es perfecto, y la capacidad de respuesta, es tremenda, aunque en la Rocket X se percibe mucho más ese “pop” que el corredor explosivo muchas veces necesita en competición.

Por lo demás, tenemos como no podía ser de otra forma, placa de carbono entre su chasis. Una placa rígida, que no permite flexar la zapatilla y que es más estable probablemente que la utilizada en otras zapatillas con carbono del sector. Diríamos que, junto las New Balance FuelCell TC, son las zapatillas con carbono, más estables y seguras del mercado.

Más de 100km con ellas y nos reafirmamos que a ritmos constantes de 4’/km aproximadamente, es cuando despliegan todo su potencial.

En explosividad, tienen rivales mucho más potentes, pero si pedimos coger un ritmo alto y constante sin dejarlo ir, esta zapatilla es una del top 3.

Hemos compartido varias sesiones de calidad en las que las series largas y los rodajes a ritmo moderado se alternaban constantemente. En series cortas, más si son en subida, verás como al principio les cuesta un poco más, son como un coche con motor diésel. Eso sí, una vez cogen el piloto automático, es difícil pararlas.

En series explosivas y cortas, cuesta un poco arrancarlas. Su extra de peso, por llamarlo de alguna forma, les perjudica en ese sentido. La Rocket X o la Carbon Rocket, son mucho mejores en esto.

Igualmente, los más cañeros, no os preocupéis, la hemos puesto en más de una ocasión por debajo de 3’35/km, y la zapatilla lo soporta con creces.

¡Ah! Se nos olvidaba comentar el otro elemento destacable de la Carbon X2, el upper y su contrafuerte. Fijaros que la estructura alta hasta el Aquiles y el aumento de protecciones ha hecho sentir la zapatilla muchísimo más cómoda que su antecesora.

Poco movimiento y buena fijación del pie, no tenemos ninguna queja. La zona delantera nos ha dado la sensación de ser un pelín más amplia de lo habitual, e incluso crear alguna arruga innecesaria, pero nada que afecte negativamente.

Y finalmente, aunque no afecte al rendimiento, pero si a lo visual, fijaros que en el último pasador del cordón, se crea un pliegue en forma de diente en el que se puede meter el propio dedo…¿Os ha pasado a alguno de vosotros?

¿La placa de fibra de carbono te queda grande? ¿No das el paso hacia una zapatilla de este estilo por miedo a su exigencia? Evidentemente, la Carbon X2 es una zapatilla para corredores exigentes, pero, gracias a su amplia base y su mayor estabilidad, creemos que funcionará bien incluso para el corredor no tan “pro” que quiera experimentar con carbono para entrenar a diario.

Igualmente, es una zapatilla que agradece tirar a ritmos rápidos, y sostenidos. Comprarla por capricho y para rodar a ritmos de 5’/km seguramente no valga la pena.

Además de ello, su suela no está preparada para ser el caballo de batalla de un runner pesado, ocasional y menos técnico. La doble capa de goma tratada que utiliza esta Carbon X2 no es la misma de zapatillas rodadoras como podrían ser las de la Clifton 7 o la Bondi 7.

Desgaste algo más prematuro que el habitual en zapatillas de entrenamiento, pero aun así, al menos en ese aspecto,  nos ha dejado bastante sorprendidos. Es muy similar en cuanto a materiales y patrón, al de la primera Carbon X, pero si observáis, las ventanillas por las que se entrevé la placa de carbono, han reducido su tamaño.

Una de las críticas de la primera Carbon X fue que según en que tipo de terrenos, las piedrecitas quedaban incrustadas en esos agujeros de la suela. Pues bueno, por ahora, problema resuelto.

Todo lo que forma esta zapatilla se ha diseñado para que el corredor se sienta cómodo en largas distancias. Es aquí cuando nosotros más hemos disfrutado con ellas.

Salidas de 15, 20, o incluso 27km con ellas en los pies incluso en zonas pisteras y casi siempre con la misma sensación de fiabilidad kilómetro tras kilómetro.

Si le pides velocidad y cambio de ritmo explosivo puede que no te convenza, y es que, en esta zapatilla, la placa y su geometría lucen mucho más en días de volumen y ritmo medio-altos pero siempre, sostenidos.