NOVABLAST 3

Pros:

1 – La primera Novablast (de las 3 que ha habido) que nos ha transmitido seguridad y soporte desde el minuto uno.

2 – La zapatilla tiene un uso ilimitado. Tanto la puedes utilizar en días de recuperación como en días de calidad. ¡Ojo! No es una zapatilla mixta.

3 – A ritmos medios (4’15”/km – 4’40”/km) la zapatilla se mueve como pez en el agua.

4 – Gran sensación de seguridad en la zona media del pie. Los cordones ajustan perfectamente y la lengüeta, a pesar de haber perdido material, genera un fit casi perfecto.

5 – El uso del Flyte Foam Blast + le permite ahorrarse unos gramos de peso y al mismo tiempo, obtener una transición más dinámica y alegre en carrera.

6 – El secreto mejor guardado de la zapatilla está en la suela. La isleta delantera es perfecta para sacar provecho durante el momento del despegue. Los que entren de punta o medio pie, lo notarán mucho más.


Contras:

1 - Las zonas de la suela descubiertas de caucho tienen un desgaste más prematuro debido a la compresión de la espuma.

2 – La zapatilla no nos ha generado demasiada confianza sobre zonas húmedas o superficies mojadas. Hemos tenido un par de sustos dignos de ser grabados…

3 – El drop alto y la cantidad de espuma en el talón, se hacen verdaderamente notorios al principio del test. Es probable que alguien muy técnico note demasiado material al rodar a ritmos suaves.

4 – El upper en la zona delantera parece limitar el alto. Los dedos se expanden bien horizontalmente pero verticalmente, parecen tener un pequeño “techo”.

El debut de esta zapatilla dejó atónitos a los fans de ASICS, incluidos también a nosotros mismos. La Novablast resultó ser una propuesta distinta y atrevida dentro de la colección “conservadora” de los japoneses y ahora, versiones después, una zapatilla que sigue rindiendo y lo más importante, enamorando a casi todos los que la prueban.

La ASICS Novablast 3 es divertimento y alegría, una zapatilla capaz de abarcar prácticamente todo siempre que hablemos en términos de entrenamiento.

El Flyte Foam Blast tuvo su puerta de entrada precisamente con la primera versión de la Novablast, y aunque fue criticado por su inestabilidad en ese primer concepto, la marca ha evolucionado y corregido ese punto débil para llegar hasta aquí. ¿lo ha logrado en esta versión 3 de la Novablast? No os preocupéis, os lo contaremos más adelante.

Con el Flyte Foam Blast + entre la mediasuela como gran novedad, unos perfiles altos y una buena dosis de amortiguación y reactividad, la Novablast 3 es de esas zapatillas que deberías tener en mente si eres capaz de llegar y mantener ritmos vivos pero no quieres abandonar ni la sobre protección ni la comodidad en carrera.

Nos hemos peleado con ellas, literalmente, y aunque en algunos entrenamientos nos ha gustado más que en otros, tenemos que reconocer que ASICS tiene aquí un caramelito para cualquier corredor medianamente intensivo que combine y soporte distintos tipos de entrenamiento y ritmos.

 

Esta es de esas zapatillas que te hacen correr “fácil”. Desde que la empiezas a descubrir durante la primera salida notas como el rebote y la sensación de impulso en la zona de los metatarsos estimulan la carrera de manera importante.

La ASICS Novablast 3 cuenta con un drop de 8mm y esa es probablemente, otra de las cosas que notarás rápidamente cuando te las pongas por primera vez. En nuestro caso, necesitamos de 2-3 salidas para hacernos a este drop alto y lo más importante, a este cúmulo de material Flyte Foam Blast + dispuesto en la zona del talón.

Este material es el gran culpable de tener ese efecto de rebote o trampolín del que tanto se habla de la Novablast. La verdad es que es agradable, no tan blando como esperábamos inicialmente y como consecuencia positiva en este caso, no tan inestable como si lo fueron sus pasadas versiones…

El talón queda sobre dimensionado a través de unas formas un tanto singulares que aposentan el pie sobre el asfalto durante la transición. Incluso exagerando el impacto con el talón (nosotros somos de medio-antepie), el pie parecía no moverse en exceso de su lugar, cosa que es muy positiva, más para un modelo como es este.

Las dos propiedades principales del Flyte Foam Blast + son la suavidad que tiene y sobre todo, la capacidad de respuesta en carrera. Es por eso por lo que, además de ser notoriamente más ligera que su versión anterior, la zapatilla se percibe más viva en entrenamientos más intensos.

Por nuestra experiencia con ellas, creemos que la Novablast 3 es una zapatilla interesante para corredores de peso inferior a los 80 kilos que busquen un modelo versátil que les permita entrenar más alegres de forma puntual, pero al mismo tiempo, ser utilizada como rodadora diaria ya que ofrecen la protección y la comodidad necesaria para hacerlo.

Han sido más de 150 kilómetros con ellas bajo nuestros pies y os podemos garantizar que si le dais el uso adecuado, la Novablast 3 es una de las zapatillas más polivalentes y versátiles sin placa que existen hoy en día dentro del mercado runner.

 

Como una auténtica zapatilla de máxima amortiguación metida en una zapatilla rodadora diaria, así podríamos resumir rápidamente a la Novablast 3 de ASICS.

Un concepto de zapatilla que muchos estaréis buscando ya que por un lado iréis protegidos, pero por el otro, podréis alternar según qué tipo de entrenamientos más picantes.

Tened en cuenta, que no estamos ante una zapatilla mixta. La Novablast 3 es buena para según que ritmos, pero tampoco nos vengamos arriba, la zapatilla no tiene la chispa ni la reacción de las zapatillas que podría haber dentro  del saco de las mixtas.

Aun así, nosotros las hemos sometido a ritmos que teóricamente no le tocarían, y sorprendentemente, al inicio de alguna que otra serie sí que logramos llegar con cierta facilidad. Lo difícil, como sucede con zapatillas de este tipo, es mantenerlos durante un período más largo de tiempo.

La zapatilla parece que al puntear o entrar con los metatarsos tiende a ser más rápida y ágil. El drop alto y sobre todo la cantidad de material en el talón limitan en algún punto, la fluidez de la zapatilla a esos ritmos más moderados. Es por eso, que, si eres un corredor con técnica de antepié, puede que percibas un exceso de material en el talón.

Además, ya desde el momento que te las enfundas al pie, percibes como la parte media se estrecha y deja libre el movimiento de pronación, con lo cual, si sois pronadores y necesitáis de refuerzo, esta no es vuestra zapatilla.

Y como muchas veces nos pedís ser concisos y concretos, vamos a intentar poner un intervalo de ritmos a los que, bajo nuestra experiencia, mejor se mueve la ASICS Novablast 3. Para nosotros, cuando más las hemos disfrutado, ha sido en ese rango de ritmos entre 4’15”/km a 4’40”/km, lo que abre y mucho las puertas a un sinfín de corredores.

En esta sección nos falta hacer referencia al upper y su construcción. Parece que ASICS ha buscado eliminar materiales extra y ofrecer un tejido simple, pero muy funcional.

A través de un mesh sin ningún tipo de refuerzos ni termosellados, la marca ha priorizado mejorar el tacto interior del pie y sobre todo, reducir unos gramos de peso a la zapatilla. La verdad es que, siendo una zapatilla de entrenamiento, es brutal el peso que han logrado sacarle (265gr en un 45eu).

En cuanto al tallaje, nosotros iríamos a la talla habitual de cada uno de vosotros, aunque hemos leído de gente que dice que media talla de menos no irá mal.  De largo bien de talla, pero de alto, nos ha dado la impresión de que ASICS le ha puesto un techo “limitante” en la zona de los dedos que solo con el tiempo y el uso, se va amoldando y ganando forma dejando más espacio.

El mesh ventila y transpira bien, y durante el mes de Septiembre (ni frío ni calor), ha rendido como esperábamos en un rango de temperaturas oscilante entre los 15ºC y los 25ªC.

Para que la zapatilla sea más segura y sobre todo, evitar que el talón se vaya de un lado hacia otro, ASICS utiliza una pieza interior rígida y una especie de termo plásticos bastante sutiles que dan estructura en esa parte concreta del pie.

Esta zona es importantísima en un modelo como este, ya que os podemos asegurar que la estabilidad del pie saldría muy perjudicada tal y como sucedió, sobre todo, en su primera versión.

La verdad es que ASICS se ha apresurado a darnos comodidad en la zona del Aquiles, desde el material del interior del contrafuerte hasta cualquier zona en contacto con el calcetín, son de esos agradables y suaves.

Finalmente tenemos la lengüeta. Una lengüeta fina como nunca antes que cuente con una especie de alas laterales que envuelven perfectamente el medio pie y no dejan rastro de molestias ni incomodidades en carrera. Lo único, por ponerle una pequeña pega, es su escasa longitud una vez tensados los cordones…

¿Decimos algo que no nos ha gustado “tanto” de la Novablast 3? Pues esta es quizá la suela, que inicialmente pintaba muy bien, pero que finalmente nos ha dejado un pelín desangelados.

En mojado han sido dos las tortas que nos hemos pegado, y digamos que ambas no han sido un simple resbalón… El terreno húmedo, las líneas pintadas del asfalto o las zonas de adoquines, no son buenos aliados para correr con la Novablast 3.

Pero en seco no tenemos quejas. Así que el primer consejo que os damos es, si las usáis, que sea en días de pleno sol en los que el terreno esté seco y corrible.

Por cierto, y únicamente como curiosidad, ASICS ha lanzado una nueva colección llamada "bathing pack" formada por 4 zapatillas de asfalto con una suela más pistera y con mayor taco. La Novablast 3 TR es la hermana montañera de esta Novablast 3 y os aseguramos, una zapatilla que puede encajar para muchos corredores que combináis asfalto con terrenos pisteros.

Volviendo a la versión de la Novablast que nos ocupa la review, hay que valorar positivamente la manera como los japoneses han distribuido el caucho ASICS Grip alrededor de la suela.

Una fina lámina de goma que protege correctamente las zonas teóricamente más sensibles y que deja en descubierto (color naranja) gran parte de la espuma Flyte Foam Blast +. Es en esas zonas donde se ha producido un mayor desgaste, ya que su compresión durante el impacto es mucho más pronunciada y no cuenta con cobertura.

La isleta independiente que hay en la zona de los metatarsos es uno de los secretos mejor guardados de la Novablast. Esta especie de pod es para que nos entendáis, algo parecido a lo que Nike busca con las cámaras de aire delanteras de las Alphafly Next% 2. Junto a la curvatura delantera, esta pieza actúa en modo trampolín, y a nuestro parecer, se convierte en el elemento diferencial que permite tirar rápido con un extra de empuje durante el momento del despegue. ¡Al principio se nota y mucho!

Durante el mes de prueba hemos podido compaginar la Novablast 3 durante entrenamientos de todo tipo. Desde días de recuperación en los que sorprendentemente se comportan muy bien, hasta días de tempo con diferentes series e intervalos a ritmo sub-maratón.

Hasta los 20 kilómetros cero problemas, de hecho, es una de las zapatillas con las cuales si priorizamos el equilibrio comodidad dinamismo, mejor se desenvuelven. A partir de ese momento, la falta de chispa y la sensación de ir unos segundos más lentos del objetivo estipulado, nos hacen pensar que el punto dulce de la zapatilla es ese. La media distancia. Pero no queremos limitar ni mucho menos la zapatilla a una distancia concreta ya que como sabéis esto de las zapatillas de running es algo muy personal.

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