SONIC 3 BALANCE

Pros:

1- Como era de esperar, el comportamiento de la suela en cualquier tipo de  superficie roza la perfección

2- La zapatilla responde bien a ritmos moderados pero también a ritmos más suaves

3- Para los que busquen una zapatilla simple estéticamente pero con un comportamiento más que sobre saliente

4- El cambio de collar respecto la Sonic RA 2 era muy necesario. Pasados más de 100km, ninguna rozadura ni molestia en el Aquiles.


Contras:

1- La fina lengüeta cuesta un poco a la hora de ajustar y puede que a alguno no le termine de convencer.

2- Distintas ocasiones en que la zona del talón lo notamos algo suelto a pesar de asegurar los cordones varias veces.

Fíjate bien porque detrás de esta zapatilla tímida de diseño, tienes uno de los valores más fiables del mercado dentro de la categoría entrenamiento. Las Salomon Sonic 3 Balance son el punto intermedio de los 3 modelos que tiene Salomon a día de hoy entre sus filas

El propio nombre del modelo plasma perfectamente su rendimiento. Esta zapatilla refleja ese balance o equilibrio entre algunas de las cualidades que muchos buscáis en unas zapatillas de running .

Zapatilla rodadora para entrenar día si y día también, hemos combinado entrenamientos de todo tipo, desde largos de 15-20km hasta días más intensos de 5-10km y la sensación que nos llevamos es que las seguiremos utilizando durante un buen tiempo.

Esta zapatilla viene a sustituir a las antiguas Salomon Sonic RA 2, y lo cierto es que, en cuanto a rendimiento nos siguen resultando muy parecidas. Lo que si ha cambiado un poco son las sensaciones en carrera gracias al nuevo Optivibe en mediasuela ,la flexibilidad delantera que es mucho más notoria y finalmente el nuevo collar que adoptan las Sonic 3 Balance.

Como decíamos antes, tienen varios aspectos muy remarcables. Primeramente el peso, ligeramente más ligera que sus competidoras directas (Cumulus, Ride o Ghost), la amortiguación a pesar de tener un punto de firme, aporta el retorno energético necesario para días de mayor intensidad, y finalmente, la seguridad de la suela Contagrip, que a pesar de ser idéntica que la de su pasada versión, nos ha mantenido seguros en días de lluvia e incluso en zonas de bosque.

Si andas buscando una zapatilla de aspecto más clásico que te permita cubrir prácticamente, todo tipo de entrenamientos, apunta las Salomon Sonic 3 Balance en tu agenda.

Viendo en su página web, vemos que hay una zapatilla pensada para corredores más corpulentos. Se trata de las Sonic 3 Confidence, que además de contar con más acolchados, suben hasta 10mm, el drop de la zapatilla.

Por lo probado hasta día de hoy y por el sabor de boca que nos hemos llevado, esta zapatilla es idónea para corredores tanto de peso ligero y también para los que ronden los 75kg-80kg. Para ambos, encontraréis un modelo fácil de hacerse a él y cómodo con el paso de los kilómetros.

La horma es cómoda, ni fu ni fa. Poco a destacar en un upper simple estéticamente que esconde el Sensifit en su interior del que más adelante hablaremos. Nosotros tenemos un pie bastante común, pero por nuestra experiencia creemos que la zapatilla se adapta bien a cualquier pie incluso si tenéis pensado meterle plantillas.

Pero el secreto y gran cambio respecto la versión anterior es la intrusión de la nueva tecnología Optivibe. Si observas, tenemos dos densidades de EVA perfectamente marcadas gracias al cambio de colores.

De punta a punta de la mediasuela tenemos un EVA blanco, llamado Infuse que es más firme al tacto y que se encargará del retorno energético y la facilidad de dar un punto de velocidad en tus salidas. Y en la parte trasera, justo donde impacta el talón, tenemos en color verde turquesa, una especie de disco de material EVA pero que en esta ocasión es menos firme.

La palabra que mejor la define quizá no seria  blandez, pero lo cierto es que si apretas con los dedos, parece incluso que el punto donde presionas, se mantiene durante unas milésimas de segundo.

Este dúo de compuestos es el secreto mejor guardado de Salomon. Las Sonic 3 Balance nos han sorprendido, ya que el EVA del talón absorbe el impacto, y rápidamente se transmite la chispa hacia la punta, permitiendo correr realmente rápido.

A la vez, tienes una zapatilla con la que compartir tiradas largas, ya que la dosis de amortiguación y acolchados en la parte trasera de la zapatilla para mantener la comodidad, son bastante numerosos.

Honestamente, nos ha faltado meterla el día de competición para acabar de dictaminar su rendimiento en carrera. Ahora que parece que lo de las carreras va para largo, es una buena época para hacer de estas Sonic 3 Balance tus zapatillas pluriempleadas en cualquier salida.

No son las más rápidas ni mucho menos, y probablemente en carrera, si finalmente podemos utilizarlas más adelante, serán unas zapatillas con las que podrás correr a ritmos rápidos sobre los 4’20/km sin problemas de manera puntual pero también podrás ir a ritmos suaves de 5’/km sobreponiendo la comodidad de tus pies.

Curioso que a ritmos suaves, percibimos más densidad y firmeza en la zona del talón, mientras que cuando apretamos el turbo, esa sensación desaparece prácticamente por completo.

El upper de estas Salomon esconde un elemento básico para que incluso algún corredor con ligera pronación pueda utilizarlas. El llamado Sensifit, se esconde como una especie de esqueleto interior que recubre la zona media del pie y que cuando hemos entrenado en cuestas, o incluso por dentro de la ciudad donde hay giros y cambios de sentido, ha fijado el pie tal y como esperábamos.

Prácticamente invisible a nivel visual y tampoco una vez en carrera. El upper se siente bien en todo momento y no tenemos ninguna queja de la parte media  ni delantera de la zapatilla. Para el verano creemos que la zapatilla transpirará bien, ya que los numerosos cortes en el engineered mesh han aprobado (hasta el momento) con nota la facilidad de respiración  durante las salidas matinales a 15º-20ºC.
 

La clásica suela de Salomon con la tecnología Contagrip sigue reinando en las Sonic 3 Balance. La marca habrá pensado que si algo va bien... ¿para qué tocarlo?. Y es que es probablmente, una de las suelas con mejor agarre, independientemente del terreno y además duradera con el paso de los kilómetros.

Días de tierra, incluso trails fáciles, pero también para ir a trabajar a diario o para jugar con los niños. Parece que la suela de estas Balance 3 seguirán siendo uno de los puntos más fuertes de la marca francesa en sus zapatillas de asfalto.

La parte delantera de esta, justo coincidiendo con las sensaciones en carrera, es menos firme que la parte del talón.

Su dibujo, se basa en lo que ellos denominan el Decoupling Geometric. El gran surco que atraviesa la suela entera llega hasta la puntera coincidiendo con el número 2 dibujado en el caucho. El apoyo anatómico del pie y la flexión de este según el modelo de la marca y el tipo de rendimiento de cada zapatilla, marcará la localización estratégica de este surco transversal.

A más competición (Sonic 3 Accelerate), la línea se acerca más hacia el interior para un despegue más pronunciado, mientras si hablamos de estabilidad y comodidad (Sonic 3 Confidence), el surco se sitúa más en el exterior, dejando una base delantera mucho más estable y amplia.

El surco en las Sonic 3 Balance se sitúa justo en medio, entre dos aguas.  En carrera se siente una transición agradable y sencilla, pero por encima de todo ágil. Ni mucho peso ni obstrucciones de algún tipo, fácil de tirar rápido si lo necesitas y además cómodo.

La distancia mayor recorrida con ellas en el pie ha sido de unos 18km aproximadamente, y la verdad es que gracias a un upper que sujeta francamente bien, y una amortiguación más que generosa, estamos seguros de que esta zapatilla servirá, tal y como hicimos con su versión anterior, para correr tranquilamente un maratón sin tener que irte al modelo de más amortiguación en Salomon.