WAVE ULTIMA 11

Pros:

1 - El diseño en esta edición Amsterdam es sin duda un gran atractivo

2 - A nivel durabilidad son un modelo resistente a prácticamente cualquier situación

3 - Perfecta compañera de entrenamiento diario donde la comodidad es uno de sus puntos a tener en cuenta

4 - Horma ancha que permitirá usarla a corredores plantilleros

5 - Los cordones son perfectos, os recomendamos utilizar hasta el último ojal


Contras:

1 - La falta de continuidad en los materiales (suela y mediasuela) les hace perder dinámica en carrera

2 - La costura lateral en la zona media se ve excesivamente frágil y

3 - No responde ágil en situaciones intensas durante entreno o competición

Si eres amante del arte y la pintura, probablemente conozcas al pintor Rembrandt van Rijn. Con la conmemoración del 350 aniversario desde su muerte, Mizuno ha querido inspirar las Wave Ultima 11 en su famoso cuadro “la ronda de noche”. Nosotros somos más amantes del arte de correr que del arte en sí, pero si Mizuno nos lo permite hacer con exclusividad en los pies mejor que mejor. La Mizuno Wave Ultima 11 Amsterdam, el modelo oficial del maratón de la capital holandesa es una zapatilla muy especial.

Se diferencian respecto la versión normal por su diseño y acabados. Colores dorados y negros representando luces y sombras en la máxima expresión de la técnica claroscuro con la que el pintor inspiro su obra más reconocida. Elegancia y arte por los cuatro costados.

Además, vemos un tirador trasero donde leemos perfectamente Amsterdam en color oro y justo en su interior, probablemente uno de los elementos más singulares. Se trata de la plantilla de estas Mizuno Wave Ultima 11, donde vemos impresos diferentes fragmentos del famoso cuadro.

Es evidente que en cuanto te las pones y empiezas a correr sientes que llevas algo distinto en tus pies. El comportamiento es el mismo que el de su versión normal, pero sus colores y su elegancia denotan exclusividad.

Ajenos al estilo, vamos a hablar de lo que realmente son estas Mizuno Wave Ultima 11 Amsterdam. Comodidad brutal en la zona del collar y una zapatilla que, a pesar de exteriormente ser robusta, no se percibe así cuando corres con ellas.

Escalón intermedio entre las Rider 23 y las Sky 3, las Wave Ultima 11 siempre han sido un modelo algo camuflado dentro de la colección. Ideales para el corredor que pese más de 75kg busque estabilidad y sobre todo resistencia

Parece difícil acabarse estas Ultima 11. Perfectamente compatibles con los peores días de entrenamientos de volumen y también para sacarlas el domingo ya sea en medio maratón o maratón completo.

Por una parte, te tienen que gustar los modelos estéticamente distintos y por la otra, estas en busca de un modelo fiable. Dos requisitos básicos para convertir las Mizuno Wave Ultima 11 Amsterdam en tus aliadas para el día a día.

Como corredor totalmente neutro que somos, nos hemos adaptado perfectamente a la pisada desde el minuto cero y creemos que además, si llevas plantillas, no encontrarás problemas de adaptación ya que cuentan con una horma ancha.

La pasada versión pecó de poco recorrido en su mediasuela. De primeras, las Ultima 11 parece que se decantan por la estabilidad, aunque a medida que vas tirando kilómetros da la sensación de que el recorrido del compuesto aumenta y eso genera mejores sensaciones en carrera.

El talón se siente firme pero bien amortiguado y eso es gracias a la famosa placa de Wave (Pebax) que llega hasta la zona media del puente y al U4ic X situado en la parte inferior del Wave el cual llega hasta la parte medial de la zapatilla.

Situados estratégicamente para todos los que entréis de talón y que además  necesitéis de sujeción en la zona del Aquiles sin temer por la inestabilidad.

Distribuidos en modo “sándwich”, vemos como el U4ic X queda en la parte inferior, justo en medio aparece el Wave y por la parte superior, el U4ic en color blanco que ocupa la totalidad de la media suela hasta la puntera.

Éste último es el que se encarga del primer impacto, más suave que en antiguas versiones, con un tacto agradable y en el que confiar cualquier corredor que se sitúe entre los 70 y los 90kg. La suavidad y control del impacto viene dada también por la plantilla (rediseñada en esta versión de Amsterdam), que es realmente acolchada y le genera una ayuda extra al U4ic para garantizar la comodidad a pesar del paso de los kilómetros.

Su contundencia podría hacerte dudar de su funcionalidad en carrera. Repletas de acolchados, elementos externos y zonas de Pebax en la suela, las Mizuno Wave Ultima 11 Amsterdam son más sencillas de mover de lo que realmente uno puede pensar.

Se amoldan bien siempre y cuando te muevas por encima de los 4’25/km, luego ya dependerá de cada uno si quiere estirarlas más o menos, pero su 100% de rendimiento lo saca a esos ritmos.

Si a algo le pondríamos una pega es a la falta de progresividad durante la pisada. Tener diferentes piezas en la mediasuela y una suela cortada en partes no contribuye demasiado si quieres tirar más rápido.

Suela y mediasuela siguen continuistas a lo que Mizuno viene fabricando desde hace muchísimos años y eso supone fiabilidad y garantía para el consumidor.

En las Sky 3 ya hemos visto un cambio total de compuestos y continuidad de materiales que ha supuesto un cambio en la dinámica de la zapatilla y veremos si futuras versiones de las Ultima serán las próximas en pasar por el tubo.

Lo que si han cambiado en la versión 11 ha sido en el upper de la zapatilla. Un mesh de doble capa fácilmente maleable en la parte delantera que es con total seguridad, el más lujoso y transpirable de las últimas versiones. Se suman a el una lengüeta que fácilmente se podría usar sin calcetines y unos cordones gruesos pero elásticos que fijan perfectamente al pie siempre y cuando llegues hasta el ultimo ojal.

Zona media con un termosellado amplio que estructura y sujeta la zona sin limitar ni obstruir el movimiento. Destacar negativamente la costura (color oro) que une el termosellado y que a nivel diseño queda algo “cutre” aunque a nivel durabilidad y función no le podemos poner ninguna pega hasta el momento.

Y para el final dejamos, a nuestro punto de vista, una de las partes sobresalientes de la zapatilla. El collar de las Mizuno Wave Ultima 11 es más circular y más cómodo que el anterior. Todo ello para olvidarte del confort y hacer que tu pisada se sienta segura independientemente del tipo de entrenamiento que tengas delante.

Encajonadas entre dos de los modelos más populares neutros dentro de la marca japonesa, las Mizuno Wave Ultima 11 Amsterdam cogen cositas de cada una de sus hermanas. Por una parte, tienen la estructura y garantía de las Sky 3 pero a un peso algo más reducido, y por la otra tienen detalles como suela y mediasuela muy simialres a las Rider 23.

Con todo ello no hace falta decir que estamos delante de un modelo destinado a correr largo con ellas. Al final de la semana hemos superado los 80km y el comportamiento en sesiones de distintas intensidades es realmente bueno. En días de series parece que el cambio de ritmo no es su fuerte, pero si te tocan tiradas de más de 1h de duración, notarás que elementos como la placa de Wave o el nuevo mesh están allí por algún motivo.

La suela es un calco a la antigua versión manteniendo la misma geometría (similar en casi todos los modelos de la marca) con la que la marca apuesta modelo tras modelo.

El caucho X10 situado en la parte trasera, justo donde la mayoría de fuerzas durante el impacto se producen, para dar durabilidad a la zona. Distribuido en forma de herradura, vemos dos piezas separadas formando la parte trasera de la suela. La continuidad de materiales en la suela no es el claro ejemplo en las Ultima 11, por ese motivo pierden algo de dinámica, pero apuestan por otros atributos como la estabilidad y el soporte.

El elemento que une la parte trasera con la delantera de la suela es la placa de Wave. Mizuno sigue fiel a ella para facilitar la transición en carrera.

En situaciones por encima de los 20km se agradece sentir la seguridad que estas transmiten, pero claro, cuando les pides más caña en momentos puntuales, echamos de menos mayor continuidad de materiales para una rápida transición.