SKYWARD X

Pros: 

1 - Un auténtico 4x4. Puedes correr por cualquier superficie completamente aislado del terreno.

2 - Tacto durante la amortiguación. De verdad, la sensación de confort y rebote es mucho más acentuada que cualquier zapatilla Hoka de entrenamiento.

3 - Por el momento durabilidad muy correcta de materiales tras 120km con ellas. 

4 - Estabilidad. La puede llevar cualquier corredor, incluso pronadores. Además la podrás llevar con tus plantillas.

5 - Una de las opciones "reales" con placa de fibra de carbono para corredores más corpulentos.

6 - Comodísima para rodar largo y tendido, pero también para andar.


Contras: 

1 -  A pesar de la construcción del medio pie y la lengüeta acolchada, esta se nos ha movido lateralmente varias veces.

2 - Tracción en zonas húmedas. Poca seguridad en este tipo de terrenos.

3 - ¿el peso total de la zapatilla? No creemos que sea un contra teniendo en cuenta el tipo de zapatilla que tenemos delante.

4 - Zona del puente algo estrecha para según que pies más anchos.

5 - Transpirabilidad del tejido utilizado en el upper

Cuando creíamos que ya lo habíamos visto todo, va y aparece esto.

Esto se llama Hoka Skyward X, y aunque no deja de ser una zapatilla de running como muchas otras, lo cierto es que tiene un qué especial y sobre todo y lo más importante, puede ir dirigida a otro tipo de entrenamientos diferentes a los que la mayoría de zapas van orientadas.

¿Entrenamiento, competición, recuperación? ¿Dónde queda exactamente situada esta nueva súper (porque es muy súper) zapatilla de Hoka?

Vamos a ir al grano. La Hoka Skyward X, aunque lleve la X de Hoka, no es una zapatilla orientada a la competición. ¿Por qué? Para saberlo tendrás que leer un poco más de esta review.

La Hoka Skyward X es, sin ninguna duda, la zapatilla con placa de fibra de carbono más amortiguada y protegida que jamás hayamos probado. Y no, no es ninguna exageración.

Sabemos que la tendencia actual tira hacia el maximalismo y las placas (de carbono o no) tanto en zapatillas para entrenar como también para competir, pero la Skyward X abre una nueva vía algo inesperada para nosotros.

Más de 48mm de perfil en el talón, una placa convexa y un combo de espumas que nos han dejado un sabor de boca realmente bueno. ¿Quieres saber de qué va la cosa?

A nadie le resultará extraño si decimos que el secreto mejor guardado de cualquier zapatilla de Hoka se encuentra en su amortiguación. Aquí no hay ninguna duda. El secreto de esta Skyward X está en su mediasuela y más concretamente en su amortiguación.

Una mediasuela algo “compleja” de explicar dada la cantidad de tecnologías que incorpora. Espuma Peba justo en la parte más alta de esta, una placa de fibra de carbono convexa situada por debajo de esta y finalmente, un envoltorio en forma de espuma EVA que le da consistencia al paquete entero. Ya ves que Hoka no ha escatimado en nada.

Pero ¿placa de carbono en una zapatilla de 320gramos? Así es. La Skyward X lleva placa de fibra de carbono, pero esta vez una placa algo singular. Lo primero que nos llamó la atención fue su forma. Una placa en forma de H que cuenta con una curvatura más similar a la construcción de un puente que a la de la típica placa de carbono en forma de cuchara de casi todas las zapatillas.. Además, es algo convexa, con lo cual, al hacer fuerza de impacto y presión sobre ella, esta flexará y hará aumentar todavía más ese efecto amortiguador que tanto nos ha gustado. Hay que reconocer que la espuma Peba que hay bajo la planta del pie también acentúa mucho esa buena impresión.

El objetivo de Hoka no ha sido la de crear una zapatilla súper reactiva y minimalista. Más bien todo lo contrario. Una zapatilla con cierto rebote, con mucha estabilidad y con una amortiguación que a más de uno enamorará.

A la hora de recomendarla, podemos hacerlo de dos maneras distintas. Probablemente para aquel corredor de 85-95Kg esta sea una zapatilla absolutamente para todo, su zapatilla más versátil, mientras que para alguien que esté por debajo de los 70-75Kg, esta zapatilla se puede convertir en una rodadora hiper protegida e incluso una de esas zapatillas regenerativas para usar en aquellos rodajes más largos y tendidos.

En términos de amortiguación, Hoka ha aplicado una configuración parecida a la de su hermana la Mach X. Ojo, que nadie se confunda, en cuanto a la recomendación y al uso ideal, estas dos zapatillas no se asemejan en nada.

Lo que sí podemos confirmar y además de verdad, es que el tacto de ambas espumas en la Skyward X es de aquellos que esperas al probarte una zapatilla Hoka. No queremos decir que el material CMEVA de Bondi 8 o Clifton 9 esté muerto, pero después de ver y sobre todo probar esto, creemos que o bien llega un cambio pronto, o la configuración actual de espumas en esos dos modelos tiene los días contados.

Así que, si eres de los que busca un 4x4 con placa con el que entrenar tranquilamente y sin miramientos y además, eres de los que piensan que la amortiguación de la zapatilla va por delante de todo lo demás, toma nota de la Skyward X.
 

Ya te hemos ido dando varias pinceladas de por dónde irán los tiros. La Skyward X no es una de esas zapatillas con las que despeinarse en carrera. Desde que te la enfundas por primera vez, te das cuenta de cómo más o menos irá la cosa.

Es pesada sí, todos lo sabemos, pero si tu objetivo es simplemente el de acumular volumen y disfrutar del entrenamiento, te gustará, estamos convencidos. 

¿La podemos considerar como una súper zapatilla de entrenamiento? ¿Se parece a la Prime X 2 de adidas? ¿Se parece a la Neo Vista de Mizuno?

Considerarla como una súper zapatilla está clarísimo de que sí, ya sea por su precio como por todo lo que incorpora, pero pensar que se parecerá a modelos como la Prime X 2 o incluso a la Mach X de la propia Hoka podría llevarte a la confusión. La Skyward X es distinta. Es más rodadora. Calentarse con ella e intentar buscar ritmos más vivos de los que realmente puede soportar, podría ser un error por tu parte. A diferencia por ejemplo del modelo de adidas que sí está pensado para este tipo de entrenamiento y ritmos más vivo.

Nosotros la hemos disfrutado muchísimo a ritmos suaves y tendidos. Días de tirada larga, días de cierto volumen en los que buscamos correr protegidos y conservando al máximo la musculatura. Además, con un rebote verdaderamente acentuado y con la eficiencia de la placa en este tipo de sesiones en las que buscamos estabilidad y seguridad.

Otro elemento diferenciador que la decanta claramente hacia el entrenamiento diario es su upper. El upper de la Skyward X es seguro, es protegido y es además estructurado.

La malla que lo protege es bastante tupida y su confort interior nos recuerda más al de modelos clásicos de entrenamiento que al de zapatillas más rápidas con placa.

En cuanto a su ventilación, podemos confirmar que es algo justita. Si bien en invierno y épocas más frías no habrá problema, ahora que empieza el calor y sobre todo durante los meses de verano, creemos que tanto material le pasará factura.

La malla mesh va equipada de protecciones y acolchados. Hoka no se ha ahorrado prácticamente nada con el fin de que la comodidad y la seguridad del corredor sean lo primero.

El contrafuerte es muy del estilo Hoka. Un contrafuerte protegido mediante acolchados que sube hasta bien arriba el Aquiles y que además de fijar perfectamente la zona, aporta la comodidad más que necesaria para acumular kilómetros sin que eso sea un posible problema. Cuenta también con una pieza plástica en el talón que genera soporte en la zona y un puntito mayor de estructura.

La lengüeta también tiene algo distinto. Como verás, en las imágenes, una especie de esqueleto (color rojo) interior en la zona del medio pie, se encarga de envolver la zona.

Siendo sinceros, se trata de una configuración que ya habíamos visto anteriormente en otras marcas, pero ya que la lengüeta de la zapatilla no viene unida lateralmente, el sistema evita bastante que esta se deslice y que el pie quede más seguro. Aun así, ha habido un par de veces donde al terminar la lengüeta se nos había ido lateralmente…

Durante las primeras salidas puede que notes cierta presión en la zona del arco, pero tal y hemos hecho con todos y cada uno de los modelos de Hoka con los cuales hemos tenido esa sensación, deja que los kilómetros pasen y te hagas a la zapatilla correctamente. Esa impresión desaparecerá.
 

Si los casi 50 mm de perfil no te dan indicios de la distancia a la que se recomienda esta zapatilla, tenemos un problema. Así de fácil.

La Hoka Skyward X es una zapatilla hecha y derecha para esas tiradas más eternas. Con ella hemos compartido rodajes de más de 24km y os podemos garantizar que si lo que estáis buscando es protección y comodidad, esta zapatilla tiene mucho que decir.

Cuando nosotros la hemos venido utilizando ha sido en aquellos días donde el reloj no era  prioridad. Es decir, si teníamos un entrenamiento con cambios de ritmo (aunque sean tiradas largas) la Skyward X no era, en la mayoría de ocasiones, la zapatilla elegida. Donde si la hemos cogido ha sido durante rodajes, más largos o más cortos, en los que buscábamos “cuidar” nuestras piernas y garantizar que con el paso de los kilómetros la comodidad seguía intacta.

La rigidez de la placa juntamente con los súper perfiles de la propia zapatilla,  hacen que flexarla sea misión imposible. Hoka lo trabaja así con el denominado Metarocker, una tecnología que simula el efecto cíclico del comportamiento de una rueda de vehículo y que verás que es fácilmente notable. El rocker de la zapatilla no es demasiado pronunciado, pero con los 5mm de drop que tiene la zapatilla y la ayuda de la placa, invitan a una pisada centrada en el medio pie y una transición homogénea y continua.

Otra cosa interesante que contaros sobre la Skyward X es que la podrás llevar por cualquier terreno. Con eso nos referimos a que la puedes meter sin ningún problema por zonas pisteras o de grava. ¡No notarás absolutamente nada!

Por asfalto irás bien (siempre que no esté muy mojado) y por terrenos descompuestos también. La verdad es que la suela de la Skyward X viene bastante cargadita de caucho.

La goma protege bien, y tras los 120 y pico kilómetros que llevamos con ella no tenemos quejas en cuanto a durabilidad de material (más allá de algún desgaste estético que no afecta al comportamiento de la zapatilla). Lo que sí podemos poner pegas es en la adherencia y la tracción en según que zonas húmedas. Aquí cuidado. Hicimos un entrenamiento de cuestas horas después de una buena tormenta y tuvimos que ir con mucho cuidado a la hora de bajar la cuesta y de hacer según que giros pronunciados. Evidentemente en terrenos llanos eso no te sucederá.

El caucho utilizado tiene cierto perfil, lo cual contrasta con muchos modelos de Hoka. Parece claro que en los últimos lanzamientos Hoka está dándole mucha relevancia a la protección de la suela de sus zapatillas. El ejemplo lo tenemos en esta Skyward X pero también lo hemos visto en la última Mach 6 o incluso en la Mach X.