Saucony lanza su nueva línea Endorphin para competición

Lo que te presentamos en el siguiente reportaje es como ir a un estreno de película al cine. Acostumbrados a una colección bastante continuista, Saucony año tras año mantenía los mismos modelos utilizando cambios más o menos significativos según la zapatilla. Viendo la tendencia actual, observamos que la gran mayoría de marcas utilizan un estrategia poco arriesgada, pero parece que la cosa cambia, al menos en este 2020. Poneros cómodos en la butaca, comprar un bol de palomitas y empezar a beber del refresco para que no os quedéis “secos” después de ver el lanzamiento del gran estreno Saucony Endorphin.

La nueva línea Endorphin que introduce Saucony en el mercado tiene un uso bastante específico. Es probable que no todos encontréis en alguna de las tres vuestra zapatilla ideal. Si buscáis soporte, mucha estructura y amortiguación no lo encontraréis probablemente en ninguna zapatilla de este trio Endorphin.

La línea Endorphin de Saucony se ha diseñado pensando principalmente en los corredores que entrenan a diario. Atletas (en el caso de Endorphin Pro y Endorphin Speed) y corredores que busquen comodidad y algo más de estabilidad sin dejar de lado el dinamismo con las Endorphin Shift.

Los que tengáis la mejor técnica y apoyo muscular encontraréis en las flamantes Endorphin Pro la candidata para el día de la carrera. La placa de carbono es la gran esperanza para muchos de vosotros que buscáis vuestras marcas personales. En cambio, si eres un corredor también de peso ligero-medio (hasta los 75-80kg) puede que con las Endorphin Speed y el nuevo compuesto PwrRun PB encontréis la candidata para entrenar diariamente con intensidad y poder utilizarlas también para competir. Sin placa de carbono pero con una ligereza sublime (205gr) veréis que la técnica también será importante para sacarle el máximo provecho.

Las Saucony Endorphin Shift pueden ser las candidatas para corredores de peso medio y algún peso elevado que esten buscando su zapatilla de ritmos alegres. Con una clara protección en el upper y con una suela más cubierta de caucho, este modelo creemos que aportará el soporte necesario además de acolchados en el contrafuerte y de la lengüeta premiando la comodidad en entrenamientos más suaves y controlados.

En cuánto al tipo de corredor parece bastante claro y evidente quiénes serán los afortunados a calzarse alguno de los modelos de la línea Endorphin de Saucony.

Si hablamos de distancias, tenemos nuestras dudas, aunque como siempre, dependerá mucho del corredor que seamos y nuestra experiencia quienes dictaminen el uso de cada zapatilla. Hemos visto a Jared Ward con las Saucony Endorphin Pro terminando sexto en el pasado maratón de Nueva York pero no todos somos Jared. Está claro que si corres para terminar un maratón por debajo de las 2h30min estas Pro pueden ser las tuyas.

La geometría de la mediasuela y los perfiles altos de la zapatilla hará que el ciclo de pisada sea rápido y extremadamente reactivo con la ayuda de la placa. Para la gran mayoría de corredores mortales (habituales) estas Endorphin Pro serán unas zapatillas para corta o media distancia en competición. Algo similar pasará con las Endorphin Speed que con una pieza de TPU entre su mediasuela (no carbono), pueden ser la zapatilla de competición más adecuada para el corredor popular. Un punto más de construcción en su upper, esta zapatilla puede ofrecer la sujeción y estructura que sus hermanas Pro no tienen. Creemos que alguien que oscile los 70kg las podrá usar como zapatilla de entrenamiento rápido pero también para competir por que no en un medio maratón ya que ofrecen algo más de soporte.

Y finalmente, aunque no sean las de competición, las Endorphin Shift son unas zapatillas más de diario. Podremos entrenar con ellas semanalmente sobre todo en días de mayor volumen y puntualmente apretar los dientes y tirar rápido. Con piezas en el upper que ofrecerán el mayor soporte de las tres, estas Shift pueden ser buena idea para cualquier corredor popular que quiera correr en todo tipo de distancias aunque a ritmos más controlados.