GHOST 15

Pros:

1 - Upper cómodo y seguro que cumple perfectamente

2 - Zapatilla neutra sorprendentemente estable y segura

3 - Modelo perfecto para todos aquellos corredores que tiendan a talonear. No descartable evidentemente para corredores más avanzados técnicamente.

4 - Dinámica y fácil de correr con ella. Una transición suave y progresiva.

5 - Durabilidad de la suela y en general, de sus componentes.


Contras:

1 - Ha sumado algún gamo respecto a su versión 14.

2 - El tacto de la mediasuela es algo firme, lo que la sitúa lejos de lo que muchos corredores buscan últimamente.

3 - Diseño algo continuista y "conservador". Es una opinión muy personal, lo sabemos.

4 - La suela recubierta de una goma tan prominente acentúa la dureza durante el impacto

5 - Mesh algo limitante en cuanto a transpirabilidad y expulsión del sudor.

Brooks Ghost es sinónimo de zapatilla fiable y segura, y podemos garantizar que, una vez testeada esta nueva versión, lo es tal cual.

La Brooks Ghost 15 no ofrece demasiadas sorpresas. Una zapatilla que le puede funcionar a todo el mundo, desde el que empieza a correr y se inicia en el running, como aquel más experimentado que busque un modelo facilón con el que entrenar a diario.

Esta nueva versión actualiza, por llamarle de alguna manera, zonas muy concretas del upper y de la mediasuela. Exteriormente la verdad es que es complicado encontrar las diferencias entre esta y su versión número 14 pero en carrera, si que sutilmente notamos una mejoría interesante en el recorrido de la espuma al impactar.

EL DNA Loft v2 de su mediasuela es el encargado de ofrecernos ese nuevo sabor de boca. Un compuesto con aire y espuma que amortigua correctamente, pero nada más allá de la simple realidad. La pregunta es, ¿por qué no han pensado en ponerle el DNA Loft v3 de las Glycerin?

La Brooks Ghost 15 es una zapatilla muy funcional para nuevos corredores, gente que haga muchas horas de pie o incluso para andar durante horas diariamente. No son versátiles como para tirar de ellas en días más rápidos en los que necesitamos subir el ritmo del entrenamiento, pero sí versátiles para un gran número de actividades. De hecho, sabemos de primera mano que esta zapatilla es una de las más vendidas en los estados unidos gracias precisamente a esa polivalencia. Tanto sirven para correr, para ir al gimnasio como para hacer turismo en cualquier lugar del mundo.

Después de haber probado su versión anterior durante muchos meses, tenemos la impresión de que la Ghost 15 ha ganado principalmente en estabilidad. Tenemos ante nosotros una zapatilla neutra pero realmente estable. Recuerda por cierto que si buscas una zapatilla como esta, pero con sistema específico de soporte en Brooks tendrás que ir a buscar la Brooks Adrenaline GTS 22.

Tal y como está el mercado en cuanto a nuevas espumas, nuevas geometrías, suelas singulares, etc, ver una zapatilla “tradicional” como es la Ghost siempre tiene su punto positivo.

Gente que no quiera experimentar y se mantengan más conservadora, son los que seguro van a idolatrar la Brooks Ghost. Además, se le suman sus 12mm drop, dato que sitúa a la Ghost con uno de los drops más pronunciados del mercado actual y que le dan seguridad y un alto control de la pisada.

Esta diferencia importante de perfiles y este diseño más normal, sitúa también a la Ghost como una zapatilla perfecta para los runners más noveles. Una zapatilla que cumple con las necesidades de este grupo de corredores que como bien sabéis es infinito.

Nosotros ya hemos pasado esa fase inicial desde hace varios años, pero tenemos que reconocer que trotar con ella, incluso en días de recuperación, se convierte en una tarea fácil y sencilla.

El DNA Loft v2 que Brooks le aplica entre su mediasuela, es una nueva variante del primer DNA Loft. Sensiblemente más ligero en carrera, pero de tacto verdaderamente parecido. Aquí no esperes un tacto chicloso y con un rebote extraordinario, más bien todo lo contrario. Esta espuma comprime de una manera muy progresiva y hace que toda la transición del pie sea bastante controlada. Digamos que sorpresas o sobre saltos en carrera, los mínimos.

Lo que, si hemos observado de manera muy positiva respecto su predecesora, es la durabilidad del nuevo DNA Loft V2. A las pocas semanas de estrenar la versión 14 recordamos varias ranuras y cortes en la mediasuela que pronosticaban un desgaste bastante prematuro. Por lo visto, y con más de 130 kilómetros encima, la cosa pinta mucho mejor en esta nueva versión.

Si no recordamos mal, fueron un par de salidas más rápidas en las que, por falta de calzado en la maleta ese día, tuvimos que sacar la Brooks Ghost 15 a pasear.

La agilidad y la reactividad no son sus puntos fuertes, eso lo sabemos todo y lo sabe bien Brooks. La Ghost es ideal en aquellos entrenamientos, independientemente de la distancia, en los que coges carretera y no la sueltas en x tiempo.

Dejando de lado ese día concreto, todos los entrenamientos con estas zapatillas han sido por el paseo marítimo de la Barceloneta…¡Nos encanta! Días en los que salimos de casa sin objetivo alguno y nos centramos en básicamente escuchar música o el podcast de turno, así de fácil va la cosa.

Lo que si notamos también es un upper sensiblemente más recogido en la parte media que el de su anterior versión. En ningún caso limitante o molesto, sino asentado y seguro. Esperamos que nos entendáis. El propio logo de Brooks refuerza esa función juntamente con la tecnología 3D Fit Print que ayuda a envolver el pie intentando limitar cualquier movimiento lateral.

Puede que, o la sensación que hemos ido teniendo, todo y haber mejorado los acabados, la transpirabilidad del material mesh es más bien tirando a justa. A primera hora del día durante los meses de invierno es ideal, pero a medida que pasan las horas y sube la temperatura, notamos menos el paso del aire. Además, y como ejemplo visible, podemos confirmar que se nos cayó una gota de sudor de la frente a la parte delantera del mesh y además de quedar perfectamente marcada, le costó un tiempo expulsarla.

Por último, queremos aplaudir, además literalmente tres cositas de esta nueva Ghost 15. La primera de ellas son los detalles reflectantes, tanto en el talón como en la punta de la zapatilla. La segunda son los cordones. Ni muy largos ni muy cortos y que tensan la zona media perfectamente. Y finalmente, una lengüeta que, a pesar de no ir unida a las paredes laterales, no se nos ha movido ni un milímetro (siempre y cuando te ates bien los cordones claro está).

En cuanto a las distancias, la Brooks Ghost 15 es una zapatilla que se defiende bien en todas siempre que la ajustes a sus ritmos y no la quieras sacar de su zona de confort.

Con ella en los pies hemos ido haciendo entrenamientos desde los 10 hasta los 20 kilómetros, y por lo menos entre esas distancias nos ha gustado su comportamiento y esa mezcla de confort y seguridad que nos ha ido transmitiendo incluso cuando se sucedían los kilómetros y las piernas empezaban a coger cansancio.

Aunque el perfil de caucho de la suela de la Ghost 15 es tirando a prominente y eso no nos termina de gustar, tenemos que reconocer que para dar durabilidad y tracción en cualquier superficie es ideal. Las hemos utilizado también en zonas de parque o incluso por la ladera del río y tanto la estabilidad como el agarre han sido buenos.

Decimos que no nos termina de gustar ese extra de material ya que no solo le suma peso a la zapatilla, sino que también le resta algo de tacto a la zapatilla. Estos extra-milímetros contribuyen a tener una pisada algo más firme en carrera que quizá, dejando libre algunas zonas de la suela, mejorarían el tacto de la pisada y la sensación.

Por suerte, Brooks le da bastantes líneas de flexibilidad a la suela con la tecnología Segmented Crash Pad. Esta suela deja entrever varios cortes o líneas que dividen la suela y que permiten flexar bastante la zona de los metatarsos, lo que en zapatillas rodadoras como estas, nos parece un acierto para trabajar la musculatura o incluso la técnica.